HISTORIA DEL JUEGO CONLEGRET

Conlegret es el nombre de un peculiar juego con el que se distraían los representantes de una antigua raza: los gigantes de las montañas. De ellos ha llegado poca información hasta nuestros días. Sólo está claro que el juego se fundó gracias al hecho de que en una ocasión se los dos últimos gigantes (Bronitrix y Gzomiabix) se aburrieron mucho. Los gigantes de la montaña eran miembros de un pueblo no guerrero y poco numeroso en el mundo Faeo y, por lo visto, justamente por eso fueron aniquilados por otros pueblos más despiadados y sanguinarios. Después de haber perdido a todos sus amigos, parientes y conocidos, Bronitrix y Gzomiabix se hundieron en la melancolía. Su insípida monotonía no les traía ninguna variedad, no tenían ninguna alegría ni entretenimiento, ni había motivo alguno para llorar o para reír. Justamente por eso, en uno de esos días aburridos los gigantes de las montañas inventaron el Conlegret: un juego de cartas en el que cada carta personificaba a algún ser poderoso del mundo de los muertos, invocado al final del juego para luchar con otro ser no menos fuerte. Combatían, es cierto, no como si fueran de carne y hueso, sino sólo como espectros (moroks), pero en la fascinación del juego esto apenas se notaba, pues los espectros eran copias idénticas con todo lo que les era inherente en su comportamiento específico en la batalla. Para utilizar la carta e invocar al espectro era suficiente con poseerla. Asimismo, era necesario una determinada combinación de otras cartas que se denominaba "círculo" y que solía estar compuesta por elementos pertenecientes al mismo campo temático. Puesto que Bronitrix y Gzomiabix, como los antiguos habitantes de Faeo, veían el futuro y conocían muchas cosas que habían pasado en los orígenes del mundo, sistematizaron con facilidad todos los acontecimientos y sobre ellos formaron la combinación de cartas. Así, por ejemplo, para poner en funcionamiento la carta del héroe Agudar, era necesario reunir toda la combinación con la participación de Magish y de todo su círculo, al mismo tiempo que se trazaba algún fragmento de la historia de Faeo en el círculo indisoluble. 

El sentido del juego se reducía a la recolección de estos “círculos” y éstos se cuentan por diez mil. La última batalla de los espectros (moroks) invocados representaba la imagen de una centena de héroes y antihéroes de todos los tiempos y de todos los pueblos, muertos y todavía por nacer. La parte que obtenía la victoria en esta grandiosa batalla ganaba el juego. 

Naturalmente éstos eran sólo los principios fundamentales del Conlegret. En realidad, el juego se fundamentaba en todo un conjunto de normas en las que se utilizaban conceptos tales como “círculos contiguos”, bonificaciones de todo tipo, en este sentido, también “al revés” – cuando en el terreno de batalla Agudar vencía a Magish (al contrario de como en la realidad) y muchas otras cosas que complican el juego. El juego entre los gigantes era tan atractivo y destacó tanto que incluso interesó a los habitantes más poderosos del mundo Faeo, a los dragones crepusculares, quienes quisieron adueñarse del Conlegret. No obstante, los gigantes se negaron a repartir sus creaciones con los autoritarios dragones y provocaron así una guerra que los exterminaría. Los gigantes de las montañas, previendo el futuro, entendieron muy bien que en el nuevo mundo no iban a encontrar un lugar digno para ellos y por esta razón se opusieron sin dudar a la voluntad de los dragones. 

Pero antes de que se enfrentaran a los dragones crepusculares en su última batalla, los gigantes de las montañas se ocuparon de que sus obras no las heredara nadie y disolvieron las cartas del juego Conlegret en cartas normales de juego por todo el mundo. La recopilación completa del “círculo” con la participación de todos los héroes del pasado, del presente y del futuro no ha sido posible, pero la obtención de “círculos” por separado y la activación de los espectros de los héroes en ellos introducidos es una misión completamente real...

 

	Barajas conocidas
	Nombre Cartas Herencia del Rey Magish (8/8) Grandes magos (6/6)       Caos (9/9) Flora mágica de Faeo (10/10) Superseres (11/??) Caballeros Subterráneos (6/6) Fortaleza de los Exiliados (10/10) Runas de los gnomos (11/11)